El pasado 23 de Julio Mamen y Eloy nos dirigimos hacia Benasque a disfrutar de nuestras vacaciones en Pirineos, cinco días con intención de hacer un “variadito” de montaña, entre deportiva, ferratas, ascensiones y lo que se nos fuera ocurriendo. La actividad estrella con diferencia fue esta cresta, que con un nivel bastante asequible (algún paso aislado de III y unos pocos destrepes de II como máximo) nos permite enlazar 6 picos de más de 3000m en una sola jornada, y, si aun quedan ganas, tras finalizar la cresta podemos ascender en poco mas de una hora otros 4 picos cercanos, enlazando 10 cumbres en un sólo día.
El día 24 por la mañana salimos sin prisa de Benasque hacia el valle de Estós, con todo el día por delante para remontar el valle hasta el refugio de Estós, descansar un rato y salir por la tarde remontando el barranco de Gías hasta el ibon Superior de Gías (2650m), donde montamos la tienda para pasar la noche. En total unas 2:30 h hasta el refugio y otras 2 h hasta el ibon. Al ser martes la tranquilidad fue máxima, pues desde el refugio hacia arriba sólo nos encontramos con una patrulla dela GuardiaCivilde Montaña que nos pidió la documentación (flipamos un poco los dos). En el ibon estábamos solos, mucha agua, buenas vistas de la cresta y muchos sitios buenos para dormir cómodos. Preparamos las mochilas, cenamos y nos acostamos nada más ponerse el sol.
La mañana del 25 empezamos a caminar a las 7 hacia el puerto de Oô, después de desmontar la tienda y guardar todo el material que recogeríamos de bajada. En una hora nos plantamos al pie de la imponente pared de la cara este del pico Jean Arlaud (3065m), la verdad es que impresiona mucho más de lo que luego resulta ser, pues no llegamos a sacar la cuerda para trepar los 150m (PD) que nos separan del pico. A nuestras espaldas sigue la cresta hacia el Seil dera Baquo y cresta del Portillon. Durante el ascenso encontramos varios clavos que nos indican que no vamos desencaminados, y salvo algún paso aislado que podría ser de III grado el resto te permite progresar sin dificultad hasta el pico.
Desde el Jean Arlaud destrepamos hacia la canal descompuesta que lo separa del Gourgs Blancs (también se puede rapelar), y tras subir una empinada pendiente nos plantamos en el pico Gourgs Blancs (3129m). Aquí empieza el cresteo más aéreo que nos permite ir enlazando los picos Torre Armengaud (3114m) y Pta. Lourde-Rocheblave (3104m). En un par de ocasiones no vimos claro seguir por la cresta y flanqueamos por la cara sur, y también trepamos una aguja sin necesidad, pensando que era el siguiente pico. Salvo estos pequeños contratiempos, en unas 4h llegamos por terreno fácil al pico Camboué (3043m), desde donde tenemos una vista magnífica de la cara norte de la cresta, así como del Posets . Desde aquí seguimos por el filo de la cresta hasta el pico Saint-Saud (3003m), sexto 3000 del día. Ya sólo queda llegar hasta el puerto de Gías por un terreno incómodo lleno de bloques sueltos.
Llegamos al collado a las 13h. Ahora nos quedaba decidir qué hacer, o bajar al ibon a por las cosas y regresar a Benasque, o ascender los 4 picos que quedan a nuestra derecha: Clarabide Oriental(3012m), Central (3020m), Clarabide occidental (3008m) y Pico de Gías (3011m), sin más dificultad que una sencilla trepada en el último de ellos. Al final decidimos regresar, pues yo ya había subido estos picos hace unos 10 años y Mamen pensaba que ya había tenido bastante para un solo día . Desde aquí los cuatro picos se enlazan en menos de dos horas (ida y vuelta al collado).
Una vez en el ibon de Gías de nuevo, queda recoger las cosas y deshacer el camino del día anterior hasta el coche, en total unas 12 horas de actividad con un nivel físico importante pero bastante asequible técnicamente. Muy recomendable.